El Real Madrid ya no es lo que era, al menos lo que venía siendo: el eterno rival a batir, contra el que todos los equipos se crecen hasta el punto, como digo en años recientes, de perder el respeto al conjunto blanco. Pero ahora el líder teórico vuelve a mandar en la tabla, en el campo, en el juego; el espalda plateada ya no luce su canoso lomo sin desplegar habilidades a la altura, ahora reta y hace mejor a sus rivales, como antaño, si bien estos acuden al Bernabéu con el debido respeto e incluso pavor de una escuadra que recupera los tres toques y la pegada, las conexiones, el empuje, la casta y la firmeza. El Madrid manda con la seguridad del líder... y su última víctima fue un más que correcto Levante de Caparrós.
domingo, 9 de marzo de 2014
domingo, 2 de marzo de 2014
Atlético de Madrid - Real Madrid: Buyo y Futre estarán orgullosos

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